Por el equipo de redacción de la Parroquia San Juan de Ribera, San Juan Bosco y San Juan XXIII de Alcoy. 

¿Sabes que significa el Jueves Eucarístico? La adoración al Santísimo es común en la Iglesia desde sus primeros inicios, se trata de una manera de compartir el amor que los hombres tenemos a Dios, y percibir el amor que Dios tiene a los hombres. En la adoración al Santísimo Sacramento, estamos en la presencia real, viva, activa, de Cristo.

Miremos al pasado. ¿cuál es el origen de la adoración al Santísimo Sacramento? En los primeros tiempos del catolicismo, se conservaba la Eucaristía de manera privada, para entregar a los enfermos, presos y ausentes. Esto ocurría, como decimos, de manera privada, debido a la persecución que sufrían los cristianos. Sería en el año 400 d.C. cuando las constituciones apostólicas indicarían que, después de la comunión, se reservaran en lo que hoy vendrían a ser los Sagrarios. En el siglo VI, con el Sínodo de Verdún, comenzarían a conservarse en un lugar más eminente y junto a una lámpara permanentemente encendida, como ocurre hoy día para señalarnos la presencia del Señor en el Sagrario. El título de este apartado habla de «inicios previos a la adoración», porque en los primeros momentos la reserva de las especies sagradas respondía al fin de la comunión… aún no al culto de la presencia de Cristo en la Eucaristía.

A partir del s. IX comienza la adoración fuera de la misa y avanza la devoción a la Eucaristía. Y fue con el Papa Urbano IV (1264) que comenzó a honrarse al Santísimo Sacramento en la celebración del Corpus Christi. Finalmente, la adoración al Santísimo más similar a lo que conocemos hoy día tuvo lugar desde el siglo XVII.

¿Por qué es importante la adoración al Santísimo? La adoración al Santísimo es importante para los católicos porque es una forma de acercarse a Dios y tener una experiencia personal con Jesús en el Santísimo Sacramento. Además, la adoración al Santísimo es una forma de ofrecer reparación por los pecados cometidos contra la Eucaristía. También es una oportunidad para pedir ayuda y orientación en momentos de necesidad.

Qué hacer durante la adoración. Durante la adoración al Santísimo, hay muchas cosas que se pueden hacer para profundizar en la oración y la contemplación. En primer lugar, por supuesto, está la oración. Simplemente, un diálogo sincero y sencillo donde hablar a Él de nuestras cosas y escuchar lo que nos va sugiriendo. Es un buen momento para rezar el rosario, leer la Biblia, meditar, cantar himnos, etc. También está la oración de contemplación: «Yo le miro y Él me mira»; simplemente sentarse en silencio y contemplar la presencia de Dios en el Santísimo Sacramento. También es común recibir la bendición del Santísimo Sacramento, recibiendo sus gracias, su protección.

Cada Jueves tienes en tu parroquia una ocasión para tener este encuentro con Dios. No faltes, el Señor te espera.